lunes, 15 de febrero de 2016

LA BOMBILLA MAGICA

Para la realización de este experimento, necesitaremos:

-Un transformador viejo de 220V/9V (También se puede fabricar el primario y el                                           secundario si tienes posibilidades)
- Una lámpara de 9V
- Un bote de plástico con tapadera
- Un trozo macizo de hierro

- Un bote de cristal con agua


COMO BIEN DICE EL VÍDEO, NO SE TRATA DE MAGIA, SI NO DE CIENCIA

Los transformadores se basan en la inducción electromagnética. Al aplicar una tensión, que en nuestro caso será de 220 voltios, en el bobinado del primario del transformador que es el que nosotros depositamos encima de la mesa, se origina un flujo magnético en el núcleo de hierro que hemos colocado en su interior. Este flujo viajará desde el bobinado del primario hasta el secundario, que es el que hemos colocado dentro del bote de plástico y hemos conectado a la bombilla de 9 voltios, que con  su movimiento originará una fuerza electromagnética en la bobina secundario, realizando la transformación y por los tanto encendiendo la bombilla.
Dicho de una forma más sencilla, cuando enchufamos el primario del transformador, se produce un campo electromagnético que viajara hasta el secundario que está dentro del bote, esta bobina, recibirá esas ondas electromagnéticas u las convertirá de nuevo en electricidad, encendiendo la bombilla.
El hecho de tener el bote con la bombilla, dentro de un bote de cristal con agua, hace que sea más  espectacular cuando se enciende, y es más fácil de explicar y entender, que las ondas electromagnéticas, no necesitan ningún medio para viajar, ya que lo hacen a través del espacio i no a través del aire, como lo puede hacer el sonido.. De ahí que las señales que mandamos a los satélites que están en el espacio, puedan volver a nuestros receptores en la tierra a una gran velocidad ya que se desplazan a la misma velocidad de la luz-
La relación de transformación del transformador eléctrico
Una vez entendido el funcionamiento del transformador vamos a observar cuál es la relación de transformación de este elemento. 

Donde N p es el número de vueltas del devanado del primario, N s el número de vueltas del secundario, V p la tensión aplicada en el primario, V s la obtenida en el secundario, I s la intensidad que llega al primario, I p la generada por el secundario y r t la relación de transformación.
Como observamos en este ejemplo si queremos ampliar la tensión en el secundario tenemos que poner más vueltas en el secundario (N s), pasa lo contrario si queremos reducir la tensión del secundario.

domingo, 14 de febrero de 2016

Polímeros y la Ley de Snell


Para la realización de este experimento, necesitaremos bolas de hidrogel, estas bolas, son polímeros capaces de absorber una gran cantidad de agua. Se pueden encontrar en numerosos bazares.
Las denominadas "perlas de agua" o "cristales de agua" son pequeñas porciones de un Polímero súper absorbente (poliacrilato de sodio o un copolímero de acrilamida y acrilato de potasio).
Hay que tener en cuenta, que para obtener el tamaño idóneo para el experimento, deberemos sumergirlas en agua, al menos durante un periodo de 10 horas.
Estas bolas se suelen colocar en un florero al que se añade agua; al cabo de unas 8 o 10 horas las bolitas se han hinchado completamente, absorbiendo, teóricamente, casi 200 gramos de agua por gramo de polímero. A la vez que tienen un fin decorativo, mantendrán la humedad de las flores. Con el paso del tiempo las bolitas van liberando el agua y disminuyen su tamaño.

Pero a nosotros lo que realmente nos interesa, es su propiedades ópticas, ya que una vez hidratado, tiene prácticamente el mismo índice de refracción que el agua al tener prácticamente el mismo índice de refracción, aparte de ser invisibles, el láser atraviesa el agua y las bolas se forma recta, entrando por un costado y saliendo por el otro sin ningún problema.


¿Pero qué ocurre si realizamos el mismo proceso, vaciando el agua y dejando únicamente las bolitas de hidrogel?

Como nos cuenta la ley de Snell cuando un rayo de luz atraviesa dos medios de distinta densidad, se produce un cambio de dirección debido a que el índice de refracción de los dos medios son distintos.